El real, sigue fortaleciéndose frente al dólar, pese a las medidas oficiales para frenarlo. En los últimos días, cerró a niveles máximos desde 1999, cuando el entonces presidente Fernando Henrique Cardoso liberó el cambio tras cinco años de paridad.
Pese a las intervenciones del Banco Central de ese país, la caída del dólar acumulada en julio llega al 1,49%, y en lo que va del año, se eleva al 7,64%. "Para algunos operadores -destaca el diario local O Globo- el real parece haber encontrado un nuevo `piso` en la línea técnica de R$ 1,53". Hoy comprar un real cuesta $ 12,30.
1.¿ A qué se debe la valorización?
Al escenario internacional. El dólar atraviesa un momento de debilidad, mientras Estados Unidos se debate entre el default y la suba del techo del déficit, una idea hasta ahora trabada en el Congreso. La fecha tope para que EE.UU. no caiga en moratoria se acerca (el 2 de agosto) y aún no se arriba a un acuerdo sobre la deuda pública estadounidense.
Al ingreso de capitales. Brasil es el 5° destino del mundo de inversiones. En el primer semestre, ingresaron US$ 50.000 millones, el mayor ingreso de capitales extranjeros de la historia, según informó el Banco Central. Esa cifra representó un 108% más que en el mismo período del año pasado.
Según la oficina de la ONU para el Comercio y el Desarrollo (Unctad), de 2009 a 2010, tras el estallido de la crisis mundial originada en el sistema hipotecario de Estados Unidos, Brasil saltó al 5° puesto desde el 15° en el ranking de países que más reciben inversión extranjera directa. El ingreso de dólares también se explica por las exportaciones de commodities. Buenas condiciones. Los inversores ven con buenos ojos la alta tasa de interés (12,5%) y las calificaciones crediticias de grado de inversión en Brasil.
"Guerra cambiaria". El ministro de Economía brasileño, Guido Mantega, atribuyó la presión hacia el real a la "guerra cambiaria" mundial, es decir, a países que devalúan "artificialmente" sus monedas para ganar competitividad en el comercio exterior. "No vamos a dejar que la guerra cambiaria nos derrote con devaluaciones artificiales en otros países", dijo Mantega.
2.¿Por qué el gobierno de Rousseff quiere frenar suba?
Al acercarse al dólar, la valorización del real afecta la competitividad de las exportaciones brasileñas y repercute sobre la industria del país. En otros términos, por un lado, las importaciones se vuelven más baratas. Por otro, se hace más difícil vender manufacturas al exterior, ya que los bienes producidos tiene un costo más caro. La consecuencia positiva se da en el sector de commodities que se exportan, principalmente, a China. Pero se "primariza" la economía, y los empresarios ya comienzan a hablar de "desindustrialización".
3.¿Qué medidas se tomaron?
El Banco Central brasileño viene realizando subastas de dólares en el mercado, al contado, como suele hacer semanalmente, y a futuro o de forwards, como no hacía desde abril. Por otra parte, se incrementó el impuesto a las operaciones financieras y se elevó la tasa que cobra a los bancos que actúan a futuro apostando a la desvalorización del dólar. Esta semana se decretó que se aplicarán impuestos adicionales a las operaciones de contratos de derivados (activos cuyo valor depende de los precios de otros activos financieros como bonos, acciones y materias primas) y revisará la regulación del mercado.
4.¿Cómo incide esto en Uruguay?
El economista de PwC Ramón Pampín dijo a El País que "no hay una respuesta única" sobre cómo puede incidir en el comercio uruguayo la suba del real.
"Deberíamos centrarnos en aquellos sectores que tienen mucho posicionamiento en Brasil y que a su vez la relación de precios es determinante pa-ra influir sobre las ventas", dijo. En ese sentido, afirmó que la relación de precios en dólares con Brasil "si bien se ha deteriorado algo en los últimos meses, aún sigue con holguras a favor".
5.¿Cómo repercute sobre el turismo?
Brasil se está volviendo más caro que Uruguay, por lo que el flujo de turistas brasileños e incluso argentinos aumenta en la medida en que ambos destinos se perciban como competitivos. Pampín indicó que si bien los precios relativos en dólares inciden, también es cierto que cada vez vienen más al país turistas con mayor poder adquisitivo.
En el primer semestre llegaron a Uruguay 213.331 brasileños 28,7% más que en igual período de 2010 o unas 47.572 personas más, según datos del Ministerio de Turismo. No obstante, la estadía fue menor y el gasto por persona también: se quedaron 5,9 días en promedio (en 2010 lo habían hecho 13,6) y gastaron US$ 818,4 por persona (el año pasado eran US$ 1.782,2).
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